El poder político del Presidente se sostiene con la incorporación a su partido de dirigentes de otras agrupaciones y el consenso ciudadano mayoritario, que apoya su gestión.
Los dirigentes fueron incorporados con contubernios políticos o financieros. Su permanencia apoyando al Presidente es circunstancial y tan pronto cambie el panorama político, se disgregarán.
El consenso es el resultado de: a) la mejora económica producida por la suba internacional de precios de nuestras exportaciones, cuya duración no se puede prever; b) el tipo de cambio alto, (exportación subsidiada e importación encarecida), que empobrece a la ciudadanía, y es insostenible en el largo plazo y c) fijación artificial de precios y dilapidación de fondos públicos El gobierno ya desató la inflación, cuyo efecto político es catastrófico.
Cuando la inflación se dispare, aparecerá el desabastecimiento, las retenciones demolerán las exportaciones, los servicios públicos no cubrirán las necesidades, el fisco será deficitario y volveremos al estancamiento.
Si aún vivimos en democracia, desaparecerá el consenso y los dirigentes cesarán en su apoyo. El poder del Presidente camina hacia un tembladeral.
19/10/2006
Dr. Marcelo J. Castro Corbat
segundarepublica@fibertel.com.ar
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