viernes, octubre 15, 2004

Traición a la Patria

Los políticos han convertido a Argentina en un país insólito. Está en permanente emergencia pública. Han transformado al Presidente de la República en un monarca absoluto, autocrático; domina al Congreso, a la Justicia, y a las provincias, que son pordioseras del Gobierno Federal.
La delegación legislativa de facultades extraordinarias en el Poder Ejecutivo, por emergencia pública, ha dejado a merced del gobierno la vida, el honor y la fortuna de los argentinos, lo que se extremó desde el año 2001. La Constitución califica a los que lo consientan, de infames traidores a la Patria, que serían los legisladores que aprobaron la delegación y el Poder Ejecutivo que la aplicó (Art. 29).
Hubo numerosas denuncias penales de ese delito, sin resolución judicial. Una de ellas la presentó el Juez en lo Civil Dr. Bernardo Nespral, el que con posterioridad fue acusado por el Consejo de la Magistratura, lo que tiene visos persecutorios.
El resquicio constitucional utilizado para violar el art. 29, no puede sostenerse para alterar los principios, garantías y derechos individuales, ni aceptarse.

15/10/2004
Dr. Marcelo J. Castro Corbatsegundarepublica@fibertel.com.ar

miércoles, octubre 13, 2004

Sinopsis Argentina

En 1776 se estableció el Virreinato del Río de la Plata. De ser el virreinato mas pobre, prosperó en base a la explotación del ganado cimarrón, el fértil suelo, los saladeros, la aduana y el contrabando. En 1810, Buenos Aires es la ciudad más importante y sigue su desarrollo durante la guerra civil.
Con la unión nacional de 1860 hay una explosión de riqueza con los barcos frigoríficos, la agricultura, la inmigración y los ferrocarriles. En París se decía: “rico como un argentino”. Argentina brilló en el mundo. En los años 1930 se inicia el estatismo, y en los 40, la justicia social: “los portuarios iban en taxi a sus trabajos”. Se expanden la corrupción, la patria contratista, importadora, financiera, y prebendaria.
La arbitrariedad cambiaria definió a los argentinos con el “déme dos”. El Estado se financió con deudas, dilapidadas. La devaluación del 2002, enriqueció al Estado, cayó la inversión productiva, empobreció la clase media y destruye los salarios.
Argentina ha sido envilecida con la quimera de riqueza fácil, oportunidades y prebendas del poder. Se destrozó la dignidad del trabajo, que no niega que siempre hubo y hay argentinos fecundos que nos enorgullecen. La riqueza real es el trabajo.

13/10/2004
Dr. Marcelo J. Castro Corbat
segundarepublica@fibertel.com.ar

Dividir las aguas

La estructura política argentina se ha deformado en las últimas décadas, y es nefasta para el futuro. Está constituida por un partido populista mayoritario, que lucha por el poder, con diferentes versiones según el poder del caudillo, mas partidos de izquierda ideológicamente divididos por su grado de socialización. Falta en la estructura la corriente política de derecha, que es la alternativa política.
La derecha ha dejado un vacío político e institucional. Creyendo que infiltrándose en el populismo podría cambiarlo, se equivocó y se autodestruyó. No hay negociación posible ni con el populismo ni con la izquierda. La suerte está jugada y hay que separar las aguas.
La derecha está desquiciada, y sufre los mismos males de los que gobiernan, discrepancias por cuestiones personales y acceso al poder. Ha perdido su mística de engrandecer el país y atender las urgentes necesidades del pueblo.
El pensamiento de derecha responde a la cultura de la mayoría de la sociedad: trabajar para el bienestar general y el propio, respetando la dignidad de las personas. Es la pasión de la derecha, que no debe caer en pactos electorales sin compromiso.

14/10/2004
Dr. Marcelo J. Castro Corbat
segundarepublica@fibertel.com.ar