miércoles, noviembre 12, 2008

Círculo vicioso de la pobreza

Los niños pobres están mal alimentados, sufren deficiencias físicas, neurológicas y cerebrales, carecen de atención médica, de educación escolar y capacitación para el trabajo. No se los forma para desempeñarse en la vida y salir de la pobreza. Los hijos de los actuales niños pobres seguirán en la miseria. Es el círculo vicioso de la pobreza.
En Argentina, se estima el número de pobres e indigentes en más de 10 millones de personas. Esta situación es socialmente insostenible.
Solo invirtiendo en alimentación, salud y educación para que los niños crezcan sanos y fuertes puede revertirse el deterioro del capital humano. El Estado es incapaz de hacerlo, por lo que es imperioso que la sociedad y el sector privado cubran las falencias. El sector privado podrá invertir si se lo libera de los impuestos que le impiden acumular capital e invertir.
Para combatir la pobreza deben mejorarse los salarios reales, sólo posible si la empresa privada puede invertir para ampliar sus actividades y crear nuevos puestos de trabajo, liberándola de los impuestos que se lo impiden. Los aumentos de sueldos básicos para compensar el deterioro de la inflación, mantienen en la pobreza a los asalariados.
La escasez de capitales requiere que las inversiones sean eficientes. No debe desaprovecharse la capacidad del sector privado para resolver el tema.

12/11/2008

Dr. Marcelo Castro Corbat
segundarepublica@fibertel.com.ar


N.B.: Se autoriza su difusión

lunes, noviembre 10, 2008

Copiar modelos políticos

Argentina es un ejemplo mundial de fracaso institucional y político, derivado del mantenimiento de estructuras perimidas de la época colonial y de la grotesca copia de modelos extranjeros. Es una acumulación de errores.
El absolutismo colonial se sostenía con los impuestos de la Aduana de Buenos Aires. Los gobiernos patrios hasta 1853, mantuvieron el sistema. La Constitución de 1853/60 plagió con errores la de Estados Unidos. Creó el presidencialismo que sin limitaciones viola la Constitución – su poder se basa en los impuestos nacionales – violentó las autonomías provinciales – produjo la macrocefalia del gobierno central y la pobreza del interior y creó el germen de la intervención del Estado en la vida ciudadana. En 1913 el derecho de voto se convierte en obligación con penalidades. En 1930, se plagia el estatismo como política anticrisis.
En 1945 se plagia el sistema corporativo. En 1957 se plagia la ficción del Estado de Bienestar incluyendo el Art. 14 bis en la Constitución. En 1994, la reforma Constitucional convierte al Senado en una segunda Cámara de Diputados, empeora el presidencialismo, copia leyes internacionales, la Nación entorpece los gobiernos provinciales apropiándose de impuestos y facultades. La nueva cultura estatizante ignora los derechos y libertades.
La rígida estructura institucional impide ordenar políticamente el país.

10/11/2008

Dr. Marcelo Castro Corbat
segundarepublica@fibertel.com.ar

N.B: Se autoriza su difusión