Es imposible que la ciudadanía no quede impactada por la propaganda oficial sobre los logros económicos que informa el gobierno: baja la desocupación – se achicó la deuda externa – el crecimiento económico anual bate records – las exportaciones crecen – el superávit fiscal supera las expectativas – se combate la inflación. Algunas de estas informaciones son percibidas como ciertas por la población, que concentrada en sus urgencias diarias, no puede analizar el crítico panorama nacional.
La caída de salarios no se compensó con el aumento del empleo. Deuda externa: no se podrán cumplir los pagos dentro de 4 años. En 2005 el producto bruto interno alcanzó el del año 1998: han sido 7 años de estancamiento, pero el ingreso promedio por persona aún no alcanzó al de la década del 80. Las exportaciones crecieron por precios internacionales, pero las retenciones las frenarán. Impuestos destructivos generan un ficticio superávit. La inflación no puede ser detenida, por el artificial tipo de cambio y el aumento del gasto público. El estancamiento de inversiones productivas impedirá el desarrollo futuro. Educación y servicios públicos siguen deteriorándose.
El gobierno debe aprovechar los beneficios del capitalismo, como hace China, y repudiar el socialismo de Castro y Chávez que llevan a la miseria a sus pueblos.
13/12/2005
Dr. Marcelo J. Castro Corbat
segundarepublica@fibertel.com.ar
Centro Segunda Republica
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1 comentario:
Es así, pero la cantinela que se escucha permanentemente en la Argentina es que está todo fantástico tropical. Creo que en fondo esto es lo que nos gusta.
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