“El pueblo no delibera ni gobierna, sino por medio de sus representantes (C.N. art. 22). A diferencia de la democracia directa griega en la que el pueblo gobernaba, en Argentina gobiernan sus representantes, que engañan al pueblo con promesas y donde el pueblo carece de derechos legales para reclamarles y sancionarlos por la violación del mandato conferido. La democracia está viciada, así como las normas constitucionales y la legislación electoral.
El pueblo solo puede elegir a los candidatos designados por la dirigencia de los partidos políticos, convertidos en corporaciones políticas, y lo habitual es que no conoce ni de nombre a su representante. No puede aceptarse que siga la corrupción de la democracia. El sistema electoral debe reformarse.
Dr. Marcelo Castro Corbat
Centro Segunda República
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2 comentarios:
Muy buena la nota. No hay nada para evitar que nos mientan y para el colmo hay que esperar 5 años para sacarlos y para el colmo hay gente que se traga los versos.
Ha notado como cuesta mandar en cana a un político?
"Entre políticos nadie es culpable hasta que no haya forma de evitar que todos se den cuenta".
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