Alguien se beneficia con la pobreza y miseria del pueblo argentino. El discurso político diciendo que la miseria está causada por los empresarios o el capitalismo, desconoce que los empresarios necesitan la prosperidad del pueblo para poder vender sus productos: es como intentar oponerse a la ley de gravedad. Irracionales políticas del gobierno condicionan la producción y generan la pobreza.
El espectacular aumento de la brecha entre ricos y pobres es producto del gobierno y los políticos, con la disparatada devaluación del peso, el mantenimiento del tipo de cambio actual, los impuestos absurdos y la corrupción. El llamado superávit fiscal es una ficción grotesca en un país empobrecido, en el que el pueblo no ve la posibilidad de recuperarse, lo que explica la inestabilidad social existente.
Los beneficiarios de esta situación son los políticos, ideólogos o corruptos que utilizan la pobreza para tener el poder. Hay que vencerlos para eliminar la pobreza.
La sociedad es un organismo vivo en permanente evolución y progreso por la imparable creatividad del ser humano, que demuele lo que crea y reconstruye nuevamente. Bíblicamente, la semilla debe morir para que aparezca la nueva planta.
24/5/2005
Dr. Marcelo J. Castro Corbat
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Centro Segunda Republica
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